Muchas veces en consulta escucho la frase
“se me duermen las manos” cuando las personas me cuentan que, al atravesar situaciones que les resultan difíciles o les da miedo, comienzan a experimentar ansiedad. Si eres una persona que habitualmente en su día a día convive con la ansiedad quizás te suene esto de las parestesias. ¿Por qué nos pasa esto y qué implicaciones tiene en nuestra salud?
Parestesias: una sensación incómoda
¿A quién no le ha pasado que nos quedamos dormidos apoyados sobre un brazo durante mucho tiempo y luego al despertar no lo podemos mover?, hablamos de las
parestesias, y eso es lo que estamos queriendo expresar cuando decimos que “se nos duermen las manos” ese
síntoma sensitivo de aumento de densidad muscular, seguido de un hormigueo característico continuo, agudo y que se vuelve incomodísimo al apoyar la zona afectada sobre cualquier tipo de superficie, extendiéndose esos pinchazos por todo la mano, pie, brazo o pierna. Cuando esta sensación molesta empieza a disminuir (lo cual se logra esforzándose en hacer funcionar la extremidad), el hormigueo y sensación de acartonamiento se reduce hasta desaparecer, seguidas de una sensación de frío que se extiende por los terminales nerviosos y que poco a poco se reajusta a la temperatura corporal.
¿Cómo interpretamos esa sensación de que se nos duermen las manos?
Las parestesias son sensaciones que fácilmente se pueden producir, como en el ejemplo que poníamos antes, y que
normalmente no nos suelen asustar porque en estos casos entendemos que la presión ejercida sobre el brazo ha dificultado la circulación de la sangre sobre esa zona y, por lo tanto, valoramos que necesita un tiempo para volver a restablecerse la circulación y la oxigenación de la zona. Sin embargo cuando aparece esta sintomatología
en momentos de ansiedad nos asustamos porque entendemos que no estamos presionando ninguna zona y aparecen sensaciones parecidas. Es en esos momentos cuando
intentamos buscar una causa que lo justifique, pero, como estamos
bajo esa emoción de miedo a causa de lo que nos parece inexplicable, terminamos generando todo tipo de
teorías catastróficas acerca del por qué de la sensación: creyendo que estamos sufriendo un ictus, o que podemos padecer una enfermedad del sistema nervioso… Es así cómo condicionamos (o asociamos fuertemente) la sensación de adormecimiento de manos o extremidades con un probable y grave peligro para nuestra salud, aumentando la desconfianza y alarmas frente a las sensaciones parestésicas.
¿Por qué se me duermen las manos realmente?
Los
síntomas sensitivos pueden estar presentes como
manifestación de ansiedad, depresiones ocultas o como forma de liberación de las tensiones emocionales. Así, en los casos de personas que conviven con la ansiedad, muchas veces
la sensación de adormecimiento de extremidades va a tener que ver con el patrón respiratorio que estén llevando consigo mismos; en concretosucede en casos en los que se producen
hiperventilaciones habituales.
Hiperventilar no siempre es un acto exagerado en el que terminamos angustiados por creer que nos estamos ahogando por falta de aire, podemos hiperventilar sin tener que llegar a esos extremos: simplemente es
un proceso en el que al respirar cogemos demasiado oxígeno. De forma involuntaria nuestro nivel de tensión o alerta puede estar activo gran parte del día, y así, casi sin darnos cuenta, esta activación provoca que nuestro organismo active el protocolo de supervivencia, respirando más rápida y superficialmente de lo normal. Al hacer esto estamos cogiendo mayor cantidad de oxígeno del habitual, produciéndose dos cambios fisiológicos en nuestro cuerpo: 1. Las cantidades de oxígeno y dióxido de carbono, normalmente equilibradas en nuestro organismo, se descompensan temporalmente y se genera un
cambio en el ph de la sangre llamado alcalosis. 2. Al iniciarse el protocolo de supervivencia, nuestro organismo entiende que debe huir o luchar contra la amenaza, por lo que debe
concentrar la mayor cantidad de oxígeno posible en las zonas centrales del cuerpo. La hemoglobina, que tiene la función de transportar el oxígeno por nuestro cuerpo, se encargará de que se retenga en las zonas centrales mientras que disminuye notablemente el oxígeno transportado a las zonas distales (extremidades como manos o pies, incluso la cabeza). No necesitamos un plan elaborado para enfrentar un peligro, necesitamos que nuestro cuerpo funcione para actuar. Durante esos momentos, al
no llegar con la misma afluencia el oxígeno a nuestras extremidades podemos llegar a sentir
mareos y que se nos duermen las manos, como cuando nos dormimos apoyados en un brazo. Es importante que entendamos el funcionamiento de este sistema para que, cuando nos suceda, no terminemos buscando otras hipótesis más complejas y que nos asusten mucho más si cabe. Las parestesias pueden ser sensaciones desagradables, pero provocadas por este patrón de respiración (en el que el oxígeno se queda embotado en la zona central del cuerpo)
no son peligrosas, simplemente es
una señal que nos está diciendo que se tiene que
volver a establecer el equilibrio oxígeno-dióxido de carbono. Al
respirar dentro de una bolsa de papel o haciendo ejercicio estamos favoreciendo un efecto compensatorio y restableceremos el equilibrio más rápidamente; de tal forma que cuando nuestra respiración vuelva a un patrón normal en el que el oxígeno y el dióxido de carbono estén compensados, el oxígeno podrá circular de forma libre en el cuerpo y el adormecimiento desaparecerá.
Hola,mi hija de 16 años estos síntomas le ocurren casi todos los días cuando se levanta para ir a clase..lo que hace que falte mucho y complique su vida….le he mandado vuestro Link,es una edad difícil,está cansada de ir a psicólogo, no termina de encontrar quien o que le puede ayudar,que difícil para todos..Gracias.
Hola Nuria, quisiera saber si lograste solucionas el padecimiento de tu hija, te pregunto porque el hijo de un mi buen amigo esta padeciendo estos mismos sintomas, si tu pudieras compartirme acerca de tu experiencia con este tema te lo voy a agradecer.
me pasa de dia por que
Hola, soy una mujer de 50 años y llevo esa sensación hace 5 años y sobre todo que me duelen mucho las articulaciones de mis dedos y quisiera si me recomiendas algunos ejercicios y movimientos.
Saludos.
Malika A.
Padezco de ansiedad desde hace mucho, he pasado por todo extrasistoles, hipocondria, me he sentido atolondrada y ahora tengo la sensación de pinchazos en los brazos, esto me preocupa mucho porque pienso que puedo tener una enfermedad grave, cómo saber si se debe a la ansiedad o realmente estoy enferma, saludos…
Hola esto me está pasando a cada ratito y no sé qué hacer me da mucho miedo .
Tengo miedo que esto es deje paralítica por favor qu puedo hacer para que se me quite .
Me pasa lo mismo que se me duermen las manos y las piernas no se que hacer y estoy preocupada que puede ser sufro de ansiedad y depresión puede ser por eso ?
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