¡Hola a todos! En primer lugar, desde el equipo de psicólogos de AMADAG, queremos mandaros un cariñoso saludo a todos ante los momentos difíciles que estamos afrontando. Hoy os vamos a dar unos consejos sobre cómo gestionar una cuarentena porque, una vez más, la vida viene a demostrarnos lo imprevisible que es y es que como decía Mario Benedetti “Cuando creíamos tener todas las respuestas la vida nos cambia todas las preguntas“.

Nos encontramos ante una situación implanteable hace solo unos meses, afrontando la incertidumbre de un futuro incierto y un presente lleno de cambios y restricciones. Son tiempos complicados para todos y aquí estamos improvisando ante una situación desconocida y cuanto menos desconcertante.

La vida, con sus dosis de realidad, vuelve a decirnos en voz alta algo que tanto nos cuesta aceptar: somos vulnerables. La palabra vulnerabilidad deriva del latín vulnerabilis. Está compuesto por vulnus, que significa ‘herida’, y el sufijo -abilis, que indica posibilidad; por lo tanto, etimológicamente, vulnerabilidad indica una mayor probabilidad de ser herido.

Evidentemente, en las horas que vivimos, la palabra vulnerabilidad va asociada a la enfermedad física, es el momento de los médicos, enfermeras, auxiliares, celadores… Ellos y ellas son los encargados de velar por nosotros, y desde aquí, también les mandamos nuestro infinito agradecimiento.

En lo que a nosotros nos encomienda, no queremos olvidarnos de aquellas personas que puedan ser más vulnerables, psicológicamente hablando, ante la crisis que nos enfrentamos. Personas con depresión, ansiedad, patologías físicas, amigos, parejas o familiares de personas afectadas y un largo etcétera. Las repercusiones psicológicas las sufrimos todos, pero en este mundo, el de la salud mental, también hay más vulnerabilidad.

Si alguien padece depresión o tiene un familiar sufriendo fobia social o agorafobia (podríamos poner decenas de ejemplos) sabrá que la activación conductual es fundamental para la mejora de cualquier patología ansioso-depresiva. Algo tan simple (que puede resultar muy complejo) como moverse de casa y socializar es algo imprescindible para las personas aquejadas de muchas patologías relacionadas con la salud mental. Desde aquí, queremos deciros, que nos acordamos de vosotros y sabemos la repercusión que estos momentos pueden tener en vosotros.

Pero como me dice habitualmente una paciente “es lo que hay” y esto es lo que nos toca afrontar. La vida entre unas cuantas paredes es ahora nuestro presente y nuestro futuro más próximo y aunque pueda ser complicado, cuidémonos unos a otros y hagamos caso a nuestros sanitarios #quedatéencasa.

Empieza la cuarentena

La Rae define la cuarentena como el tiempo de aislamiento preventivo al que se somete durante un período de tiempo, por razones sanitarias, a personas o animales.

Y en eso estamos, en cuarentena. Cómo podrás observar no llevamos nada bien esto de quedarnos en casa, aunque muchos fines de semana lo hayas hecho anteriormente sin ninguna queja. Pero al ser humano, solo hace falta que le quiten algo para que lo desee con todas sus fuerzas. Nuestra tendencia claustrofóbica viene a decirnos que igual no queremos salir, pero por favor, déjame la puerta abierta.

Decía Nelson Mandela que la libertad nunca se puede dar por sentada, cada generación debe salvaguardarla y extenderla.

Como gestionar una cuarentena

Los días pueden hacerse largos, podemos no estar acostumbrados a trabajar desde casa, ni a pasar tanto tiempo con nuestros familiares, ni a tener ocio casero, pero nos toca adaptarnos ante la nueva situación y sacar lo mejor de nosotros para sobrellevar la situación lo más amablemente posible. Hoy os damos una serie de pautas para evitar que la cuarentena se convierta en un infierno, una serie de pautas que nos ayuden a gestionarnos y a cuidar nuestra salud mental, que tan importante es estos días.

Que el día empiece y acabe a su hora

Los desajustes horarios solo propician desajustes emocionales. Es importante que las personas mantengamos unos horarios fijos que nos ayuden a regularnos. Evitemos levantarnos cada día a una hora distinta o acostarnos simplemente cuando tengamos sueño. La realidad resulta ordenada bajo la rutina y en el fondo, esto es mucho más tranquilizador para nosotros de lo que podemos llegar a imaginar. La desorganización puede resultar atractiva cuando su carácter es temporal, pero a largo plazo genera sensación de caos, descontrol e inseguridad.

Arréglate

Si, sabemos que estar en casa propicia el pijama y el moño en la cabeza, pero arreglarnos, vestirnos, peinarnos… propicia que estemos más dispuestos a la activación. Pasar las horas tirados en el sofá, puede propiciar estados de ánimo más depresivos y favorecer el pensamiento obsesivo. Levántate y prepárate para el día como lo harías habitualmente.

Realiza deporte

En la medida de nuestras posibilidades es importante que nos mantengamos activos. Tenemos al alcance aplicaciones gratuitas (Nike training, por ejemplo) que nos permiten realizar ejercicios en muy pocos metros cuadrados y sin demasiado material.

Establece un horario donde esté incluida al menos una hora de deporte. El deporte a nivel emocional, aumenta y mejora el estado de ánimo, facilita la regulación emocional de la ira y reduce el estrés y la ansiedad estado y rasgo (puesto que disminuye la tensión muscular excesiva, aumenta la sensación de relajación y bienestar, reduce las preocupaciones o rumiaciones y facilita la distracción frente a la hipervigilancia hacia la ansiedad).

Mantén tu espacio personal

Sabemos que pueden ser horas donde estemos en contacto continuo con nuestros familiares, algo maravilloso, pero que puede resultar muy invasivo al mismo tiempo. Que las personas que comparten el mismo espacio puedan tener sus lugares de intimidad mejorará las relaciones con nuestros seres queridos y nos permitirá reducir nuestras sensaciones de agobio.

Mantén el contacto con tus amigos

Son muchas las personas que se están uniendo a las quedadas online. Skype, video llamadas de WhatsApp… Comparte tu tiempo y relaciónate. El aislamiento tiene efectos sobre la salud mental, cada vez se reconocen más sus nefastas consecuencias a nivel físico, mental y emocional. Varias investigaciones nuevas sugieren que estar socialmente aislados es malo para nosotros.

El ocio casero

Si, ya sabemos que Netflix está echando humo y no seremos nosotros quien digamos que no nos está echando un cable en estos momentos, pero también necesitamos un ocio más activo. Juega a juegos de mesa, juega con tus hijos y si no tienes con quien pasar la cuarentena, juega online con otros. Mantengamos un ocio que vaya más allá de estar sentados viendo imágenes pasar.

Mantén tu casa limpia y ordenada

Las casas desordenadas son sinónimos de mayor estrés psicológico. Parece que mantener un orden en el ambiente, propicia más orden también a nivel psicológico. Son muchas horas en casa, hagámonos un favor.

Planea

Si, sigue planeando, sino corremos el riesgo de dejarnos llevar por la inercia de las horas y cuando nos demos cuentas: ¡Llevo toda la tarde en el sofá! Haz tus planes caseros, gestiona el tiempo y cúmplelo. Sabemos que es muy complicado tener una buena rutina en nuestra propia casa, pero es tiempo de ser algo estrictos con nosotros en este aspecto si no queremos que las paredes se nos echen encima.

En unos días, volveremos todos a nuestra rutina, ya no habrá niños en casa todo el día, ni habrá que inventar juegos constantemente para entretenerles, tampoco habrá tiempo para improvisar que hacer en casa tanto tiempo con tu pareja, tampoco pasarás tantas horas en el sofá con tu compañero de piso o quien sabe cuánto pasará para que vuelvas a pasar tanto tiempo solo, aprendiendo a entretenerte y a llevarte bien contigo mismo.

Son tiempos extraordinarios, no por ser maravillosos, sino por salirse de lo ordinario de nuestras vidas. Decimos muchas veces, que la vida pasa muy deprisa, que no vemos a nuestros hijos crecer o que casi no tenemos tiempo para los nuestros. La vida nos ha hecho un pause, miremos detalladamente, porque no olvidaremos, para bien y para mal éste tiempo. El sol sabrá mejor que nunca, no tengo ninguna duda.

Animo y fuerza, como dice un nuevo lema que se ha hecho viral por las redes sociales #TODOSALDRÁBIEN. Mientras tanto estamos juntos, trabajando en la misma dirección y nosotros junto a vosotros, ayudándoos a gestionar lo mejor posible estos días que nos quedan por delante.

Algunas ideas para nuestro nuevo ocio casero

La editorial Hearst España ofrece todas sus revistas de acceso gratuiro online: 10 minutos, harper’s bazaar, esquire, que me dices, elle, Cosmopolitan, mi casa, nuevo estilo, men’s/women’s health, fotogramas… 

Festival me quedo en casa y cuarentena fest: muchos artistas a través de sus perfiles de Instagram harán directos de unos 30 min como si de un concierto acustico privado se tratase. Los horarios aquí. 

Se puede también ver teatro online, estas son las obras disponibles


Algunos autores, como el dibujante de comics El Torres o los autores de El bosque han subido todos sus libros/comics gratis para quien los quiera disfrutar. ¡Lo mismo tu autor favorito lo ha hecho! 

Movistar lite estará durante un mes gratis debido al coronavirus 

Si eres socio de la biblioteca tienes la posibilidad de acceder al catálogo de efilm, un Netflix de las biblios, cada comunidad tiene su propio catálogo.

Para los que teletrabajan, pccomponentes ofrece asistencia remota gratuita si les envias un certificado de empresa de que estas teletrabajando para no saturar los servicios. 

El Museo del Prado, el Reina Sofía y el Thyssen ofrecen contenido audiovisual y explicación de cuadros a través de sus webs para quien le interese.

La editorial Perrolokogames libera su juego de mesa Dirty Fridge en pdf para quien quiera imprimirlo y ponerse a jugar.

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