En 1979 se publicó el que para muchos es el mejor álbum de The Clash, London Calling, Esa canción que tiene mucho que ver con un sentimiento que tratamos aquí todas las semanas, la ansiedad y la incertidumbre. Cuando Joe Strumer y Mick Jones, los principales compositores de The Clash la crearon no estaban pasando por su mejor momento. Endeudados, algo perdidos, sin mánager que les dirigiese. Sin embargo supieron captar perfectamente el ambiente en ese momento, una sensación de paranoia y opresión.
La ansiedad tiene mucho que ver con estar perdido y desorientado, con un estado de alarma constante y una amenaza difusa. En la ansiedad el enemigo no se ve, pero está en el aire. Nuestra amígdala es como esa alarma antiaérea que avisa de un bombardeo, nuestro ejercito se prepara para luchar y todos los síntomas se manifiestan, parece una guerra. O eso creemos. Nos cuesta entender que la ansiedad no es el enemigo. Si miras la configuración de muchos libros de autoayuda, nos instan a eliminar la ansiedad, a combatirla, a superarla, a echarle un par de narices, pero en realidad, si te fijas, lo que haces es declararte una guerra a ti mismo. La ansiedad nunca ha sido el enemigo, la ansiedad es el dolor, ¿y como vas a declararle la guerra a tu dolor?
“Nunca sentí nada parecido…” nos dice Joe Strumer en la canción. Y es así como las personas viven la ansiedad por primera vez. “Londres se esta inundando y yo vivo junto al río.“
En realidad, el enemigo esta en casa, porque el verdadero enemigo son tus creencias. Tus creencias limitantes, la creencia de que puedes ver el futuro o que de verdad sabes que es lo que están pensando los otros. Casi nunca las cuestionamos, las transformamos en dogmas de fe. Yo tengo las ideas, pero las creencias me tienen a mí, nos decía Ortega y Gasset. Se generan en el pasado, se emiten en el presente y condicionan nuestro futuro. No te asientes demasiado en ellas o envejecerás demasiado pronto.
El punk siempre ha aparecido en periodos de estacamiento musical, y parece que no esta interesado en crear cosas sino en romper lo establecido. Nace de la frustración y de la rabia y nos invita a la acción. London Calling nos invita a pensar en el siguiente momento punk de tu vida. A lo mejor no te vamos a decir que quemes un contenedor, pero… ¿Qué tal si pruebas a sorprenderte a ti mismo? ¿Qué tal hacer algo que nunca creíste que harías, o que crees que no va contigo? Es genial comprobar la capacidad que tienes de sorprenderme a mi mismo.
Imagen de portada de Adriano Agullo, CC BY 2.0 https://creativecommons.org/licenses/by/2.0, via Wikimedia Commons
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