Los orígenes de la fobia social se sitúan por lo general antes de que la persona cumpla los 25 años, y a menudo existen principios de ella durante la infancia. Este trastorno de ansiedad se materializa en la dificultad para participar de conversaciones, para dirigirse a otras personas o también para hablar en público; existe el miedo a decir cosas inoportunas o al rechazo por parte de los interlocutores. Estas dificultades pueden terminar derivando en una acumulación de ansiedad que desate ataques de pánico, generando círculos viciosos en los que también se desarrolla el miedo a la propia posibilidad de un ataque.
En Amadag llevamos a cabo una intensa actividad para el estudio y el tratamiento de la fobia social. Somos una entidad comprometida con los avances sociales tanto respecto a esta patología como a la agorafobia o las fobias específicas. Poniendo gran atención al desarrollo de terapias que reúnan distintas perspectivas y metodologías, sentamos las condiciones que permiten a los pacientes obtener un avance palpable, incidiendo en la relajación y las habilidades sociales. Nos esforzamos por ayudar a las personas que acuden a nosotros a poder afrontar con mayor confianza esas situaciones que se pueden convertir en un verdadero obstáculo en su vida diaria.